Los que conocen de cerca lo que ha tenido que sufrir Johan Vázquez en el fútbol italiano celebraron tan eufóricos como el defensor mexicano. El medallista olímpico empalmó el cabezazo que timbró la victoria de Cremonese sobre Spezia en la última fecha de la Serie A. Un gol que da alas a la lucha para la salvación del elenco del Caballito.
“Al fútbol no le puedes mentir”, decía el zaguero en sus redes sociales hace algunos meses. Le tocó difícil, pues en paralelo a sus actuaciones con la selección mexicana, le tocó sufrir el descenso con el histórico Genoa y luego saltar al Cremonese para quedar último en las rotaciones del entrenador Massimiliano Alvini.
Pero el míster que había despreciado al sonorense fue despedido en enero, y salió el sol para el hombre que debutó en Cimarrones hace seis años. Llevaba tres partidos fuera de la convocatoria cuando llegó Davide Ballardini, el mismo entrenador que había confiado en él en el Genoa. “Todavía no entiende nuestra liga, pero es muy talentoso y seguiremos con él”, decía el allenatore en 2021.
Johan Vázquez responde a la confianza
A partir de la llegada de Davide Ballardini, Johan Vázquez no volvió a salir del equipo. Se perdió sólo tres partidos en el calendario, dos por lesión y uno por suspensión, y sumó 16 presencias como titular con un rendimiento que en Italia califican como “exponencial”. El Cremonese se empapó de su talento y suma ocho de los últimos 15 puntos disputados en Serie A, todo un récord para el subcolista.
Por eso, la victoria sobre el Spezia tiene un sabor especial. El cuadro del Caballito quedó sólo tres puntos por debajo de la línea de salvación, después de dar ocho y diez puntos de ventaja en un momento, y se acerca al gran objetivo de la temporada. Johan Vázquez sabe que el fútbol tiene revanchas, y la suya puede ser la más dulce.