A inicios de junio, se dio a conocer que Pablo Lyle y su cuñado Lucas Delfino libraron la demanda civil que el hijo del fallecido Juan Ricardo Hernández presentó en su contra por daño emocional.
Recordemos que en marzo de 2019, Pablo Lyle y Lucas Delfino de camino al aeropuerto de Miami, se enfrentaron en un incidente de tránsito con el ciudadano de origen cubano, a quien el actor golpeó fuertemente y luego de ser trasladado a un hospital, perdió la vida.
A pesar de la gravedad del caso y de que en dos años no se ha podido llegar a una disolución del tema, las demandas en contra de Pablo Lyle continúan y este fin de semana se dio a conocer que el cuñado del actor, busca la manera de deslindarse del caso con lo que se dividiría inmediatamente la defensa de Pablo Lyle.
Fue durante la audiencia del pasado 1 de julio que los abogados de Lucas Delfino declararon que su cliente no tuvo absolutamente nada que ver en el altercado y que su única participación fue manejar el vehículo de donde el actor se bajó antes de comenzar el enfrentamiento.
Ahora parece que las cosas se han complicado aún más para Pablo Lyle pues según una revista de espectáculos, Lucas Delfino ahora lo ha dejado sin casa. Esta información fue revelada por un supuesto amigo cercano al actor quien explicó lo siguiente:
"Ana está trabajando de todo, promocionando productos de belleza, ropa y seguros de gastos médicos mayores. También, su hermano Jorge, quien vendió un gimnasio para ayudarlo económicamente, y su hermana Silvia y su esposo Lucas Delfino, quienes le prestaron el departamento donde pasa su arresto; sin embargo, ahorita tiene un serio problema con su cuñado.
"Al verse involucrado, obviamente Lucas explotó de furia y más porque la indemnización puede llegar a ser de una cuantiosa fortuna, pero su peor molestia fue que Pablo trató de deslindarse y dejarlo solo con el problema".
"Tras haber ayudado incondicionalmente a su cuñado, lo mínimo que esperaba Lucas era que Pablo se hiciera cargo de esta demanda y no lo embarrara, pero ahora es tanto su enojo, ¡que ya hasta lo corrió del departamento!", confesó la fuente consultada.