Las cuestionadas decisiones arbitrales del VAR no se hicieron esperar en el Derbi Madrileño. En el primer tiempo del partido entre Atlético de Madrid y Real Madrid, Felipe, defensor de los "Colchoneros", tocó el balón con la mano producido de un centro desde el tiro de esquina de Toni Kroos.
El partido fue detenido momentos después y Alejandro José Hernández Hernández, árbitro del compromiso, acudió a la revisión en el monitor del VAR y, tras una serie de repeticiones de la jugada, decidió que no había penal por la mano de Felipe.
La decisión marcó un rumbo decisivo en el partido. El duelo en el Wanda Metropolitano entre primer y tercer lugar, respectivamente, influye directamente en el campeonato de La Liga.