Luego de comprar su casa en una subasta, los nuevos dueños se llevaron una tremenda sorpresa al realizar su primera visita, y es que cuando abrieron la puerta de su domicilio, un gato salió corriendo del inmueble tras permanecer 52 días encerrado sin agua y sin comida.
De acuerdo con el portal RT, los hechos ocurrieron en la ciudad neerlandesa de Schiedam, en donde dueños descubrieron al felino la noche del pasado 21 de agosto, por lo que fue trasladado con veterinarios y personal de un refugio de animales ya que el gato estaba visiblemente delgado y agotado.
El gato, apodado como Finn, tuvo que ser sometido a una terapia intravenosa para que tuviera una pronta recuperación. A pesar de estar tanto tiempo encerrado, Finn tenía un estado de salud sano, pero se encontraba, ocasionalmente, demasiado irritado con sus cuidadores, posiblemente por su solitario confinamiento.
Según lo informado, en las heces del felino se encontraron trozos de papel que probablemente ingirió al buscar comida dentro del domicilio. Los veterinarios y personal del refugio especulan que, como es imposible sobrevivir sin agua durante tantos días, es muy probable que el gato lamía las gotas de agua de algún grifo.
Aunque lento pero seguro, Finn comenzó a ganar peso debido a que le dan de comer varias veces al día, lo que hace que poco a poco se vaya fortaleciendo.