
Kate Middleton cumplió 40 años y desde la Casa de Cambridge celebraron este importante día en el calendario con una selección de fotografías donde la duquesa posa con espectaculares vestidos para el fotógrafo del mundo de la moda, Paolo Roversi.
De acuerdo con la cuenta oficial de la realeza, los retratos serán parte de una exposición para la National Portrait Gallery de Londres para el próximo año.
En las imágenes, la duquesa de Cambridge luce tres vestidos de Sarah Burton para la firma de Alexander McQueen y serán exhibidos en tres lugares diferentes elegidos por Kate por tener un significado especial para ella.
"Estos nuevos retratos que se lanzaron para conmemorar el 40º se mostrarán a la comunidad en tres lugares significativos: Berkshire, St. Andrews y Anglesey, como parte de la @NPGLondon, exposición nacional 'Coming Home', antes de la reapertura de la Galería en 2023".
En Berkshire, la duquesa pasó su infancia, en St. Andrews estudió en la universidad y conoció al príncipe Guillermo, fue en Anglesey donde vivieron juntos al inicio de su matrimonio.
Radiante en blanco y negro
En el primer retrato, Middleton posa de perfil y luce el pelo ligeramente rizado y un vestido blanco con escote barco, lazos en los hombros, cintura ajustada y una falda abullonada.
Asimismo, se aprecia su hermoso anillo de compromiso con un zafiro de Ceilán rodeado por 14 diamantes, el cual perteneció a la princesa Diana de Gales, mientras que los pendientes son unas perlas que Lady Di recibió como regalo de boda.
Sonrisa Real
Paolo Roversi captó el carácter amable y sensible de Kate en otro retrato en el que la duquesa luce un precioso vestido rojo de manga asimétrica abullonada y bolsillos en la falda.
El diseño lo completa con unos aretes que pertenecen a la reina Isabel II. La monarca lució estos pendientes de diamantes en forma de lágrima en 2012 y tras ello decidió cederlos a su nieta política.
Más personal
En la tercera estampa, Kate Middleton, quien vistió un vestido blanco de manga asimétrica y volantes, mira fijamente al objetivo y derrocha naturalidad. En esa imagen, el fotógrafo optó por el blanco y negro. Sin duda una imagen más íntima y personal de la duquesa.







