Alec Baldwin sigue sin despertar de la pesadilla que vive desde la tarde de este jueves, cuando disparó un arma que, aunque se pensaba era de utilería, llevaba dentro de sí al menos una bala de verdad que acabó con la vida de la cinefotógrafa Halyna Hutchins.
"¿¡Por qué me dieron una pistola caliente!?", reclamó Baldwin desesperado al equipo de producción de "Rust", según reportó un testigo presente en el rodaje al medio "Showbiz 411".
En el argot cinematográfico, una "pistola caliente" hace referencia a un arma cargada con balas reales, un objeto que bajo ninguna circunstancia debía estar presente en la filmación de la película, donde habitualmente se utilizan pistolas de goma que ni siquiera permiten la carga de balas.
En algunas de las fotografías tomadas por testigos, es posible ver al actor completamente conmocionado hablando por teléfono, mientras que en otras debe apoyarse en sus rodillas mientras mira al suelo.
En el accidente también resultó herido en el hombro Joel Souza, de quien en un principio se dijo, se encontraba en terapia intensiva luchando por su vida en el Centro Médico Regional Christus St Vincent. Sin embargo, esta información fue desmentida por la actriz Frances Fisher.
"Nuestro director Joel Souza está fuera del hospital. La información que circula respecto a la gravedad de su lesión, es errónea", escribió Fisher a través de su cuenta en Twitter, en la que arrobó a una periodista del The Daily Beast, con la intención de que el medio corrigiera una de sus notas.