El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ofreció 88 mil pesos a una mujer de 31 años a la cual se le amputaron las piernas, extirparon el útero y el ovario tras un "error de diagnóstico" luego de acudir al Hospital General Regional número 1 de Querétaro, sólo para retirarse el Dispositivo Intrauterino (DIU), ya que estaba "traslocado" en 2018.
Vanessa Dip, de 31 años, dijo en entrevista radiofónica en el programa Así las Cosas de W Radio, que el IMSS, a cargo del Zoé Robledo Aburto, ni siquiera le ha ofrecido una disculpa por el daño que le causó.
"Obviamente eso no va a reparar mi daño, pero ayudaría un poco en la parte emocional, porque, quizá, ellos no se ponen a pensar todo lo que llegaron a truncar, (...) Me ofrecen creo que 88 mil pesos para la reparación del daño y yo quisiera preguntarle a los médicos que cometieron esos errores, si esos 88 mil pesos valen sus piernas, porque con gusto yo se las pagó para que regresen las mías", dijo la joven madre con dos hijos.
Ayer, En La Hora informó sobre la recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) al IMSS, en donde denunció que la mujer, de entonces 27 años, acudió tres veces por un dolor abdominal a la Unidad de Medicina Familiar número 9 (UMF-9), ahí le diagnosticaron una infección en vías urinarias y colitis sin haberle realizado algún estudio.
Posteriormente acudió al área de ginecobstetricia en el Hospital General Regional número 1 de Querétaro con la intención de que le retiraran el DIU, ya que le diagnoticaron "DIU traslocado", es decir, que el aparato se encontraba en una posición inadecuada, por lo que debían retirarlo, procedimiento que se hizo con pinzas y no por legrado como la joven tenía previsto, además de que no se le proporcionó algún tipo de medicamento de antibióticos para evitar posibles infecciones y le mencionaron que el seguimiento lo tendría que hacer en su la Unidad Familiar 9.
Tres días después, la víctima acudió a la UMF-9 por un dolor lumbar, donde se anotó como antecedente el retiro del DIU y que, sin llevar a cabo algún análisis, se le diagnosticó lumbalgia aguda. Finalmente, la situación de salud de la mujer empeoró y fue trasladada al HGR-1, en donde Vanessa ingresó por grave pérdida de sangre, gastroenteritis infecciosa y deshidratación severa, situación que provocó que la mujer sufriera un paro cardíaco en donde fue reanimada durante 30 minutos, además se le realizó extirpación de útero y ovario y, posteriormente, se le amputaron ambas piernas.
IMSS la culpa por infección
Vanessa Dip detalló que tras su caída en coma durante 9 días, el IMSS dijo a su familia que ella había traído una infección y que la joven madre "era la culpable de estar en esa situación".
Agregó que todavía se someterá a una cirugía más para que le quiten el hueso de su pierna que le molesta.
La mujer exige que el IMSS le dé unas prótesis nuevas, un aumento de pensión porque tiene lo mínimo, reparación del daño y becas y talleres para sus dos hijos.