Los sérums se han convertido en una de las partes más básicas e importantes en nuestra rutina de cuidado de la piel, ya que su característica principal es que tienen grandes propiedades para nuestra cara gracias al nivel de concentración de ingredientes activos.
Si bien, hemos incluido estos productos en nuestra rutina de belleza diaria, es posible que no estemos aplicándolo de la mejor manera, ya que sin importar lo fácil que se pueda llegar a usar, muchos cometemos errores que dañan las fórmulas de los sueros faciales.
¿Cómo aplicar bien tu sérum?
Te dejamos una serie de tips importantes para que puedas aprovechar al 100% las fórmulas de tus sérums ¡toma nota!
No lo pongas directo
Uno de los principales errores al aplicar el suero es que ponemos el dosificador o gotero directamente en nuestra cara, causando que las bacterias invadan el producto. Cuida que tus manos estén limpias al aplicar tu suero, ya que debemos poner primero los productos sobre las palmas.
Usa las palmas de tus manos
Pon unas cuantas gotas del sérum sobre las palmas de tus manos, no sobre los dedos ya que al ser un producto liquido puede colarse entre tus manos y terminarás por desperdiciar mucho producto.
Aplica la cantidad necesaria
Cada suero es diferente, por lo que debes de seguir la aplicación, según lo indique ya que si usas más productos del recomendado estarás desperdiciando y no será funcional.
Evita arrastrar producto
Muchas veces creemos que la aplicación de nuestro suero debe ser uniforme y abarcar toda la cara, por lo que solemos arrastrar producto y terminamos aplicando más. Lo mejor que puedes hacer es presionarlo en tu piel.
Conoce tus necesidades
Determina cuál es el sérum correcto para ti y evita combinar más de dos, ya que puedes llegar a tapar los poros y no obtendrás los resultados que deseas. Te recomendamos utilizar un suero facial por la mañana y otro por la noche, de esta forma podrás obtener los beneficios completos de cada uno.