El "Middle Sunday" es una tradición en Wimbledon, que consiste en el cese de actividades el segundo domingo de la competencia, nació en los años 80 para eliminar el ruido y alboroto en esta localidad a las afueras de Londres, solicitadas por los vecinos de la zona, así como para dar descanso a la hierba del All England Club, desgastada después de una semana de competencia
Sin embargo, esta tradición, celebrada incluso por los tenistas, ya que supone un día de descanso, sin actividad, finalizará a partir de 2022 como dio a conocer la casa del Grand Slam más célebre del panorama del deporte blanco, con lo que se igualará el calendario de 14 días de juegos, similares a Australia, París y Estados Unidos.
Con esto, el pasado 5 de julio de 2021 se vivió el último “Maniac Monday”, que sostuvo los octavos de final con Roger Federer y Novak Djokovic como los principales carteles que se enfrentaron a Lorenzo Sonego y el chileno Christian Garín, respectivamente.
Este barrio todavía contemplado dentro del área metropolitana londinense alcanzó un acuerdo con el All England Club y la organización del evento para mantener la estabilidad de la zona, teniendo incluso, un toque de queda para no interrumpir el descanso y silencio de la zona, por lo que no puede haber evento alguno pasadas las 11 de la noche.